El camino recto
Hace 3 días
Fernando, de Madrid
Al salir del garaje y enfilar la carretera para ir al hospital con mi mujer, noté que la dirección se desviaba sola. Sospeché de un pinchazo, paré, me bajé y comprobé que, efectivamente, una rueda estaba en el suelo. Como tenía otro coche en el garaje, dejé aparcado el del pinchazo y finalicé la ruta. Al regreso a casa, hice la solicitud de ayuda a MAPFRE mediante su aplicación y, al instante, recibo un SMS indicando que en 45 minutos tenía la ayuda en la puerta. Pues bien, a los 15 minutos me llamaron que estaban a la puerta. Mejor atención imposible.