#MAPFREstories

Estaba pensando en alquilar una vivienda de carácter temporal y no sabía cuánto me iban a retener en la declaración de la renta, se me ocurrió pedir información al programa MAPFRE teCuidamos, llamé y me resolvieron todas las dudas en un breve periodo de tiempo.

Estaba jugando al basket con unos amigos y, cuando volví al coche, vi que la rueda estaba desinflada por culpa de un tornillo. El compañero de MAPFRE, vino después de una llamada super rápida por parte de MAPFRE y me salvó la rueda, muy agradecido.

Me quedé sin batería justo cuando más lo necesitas, al salir del trabajo, cuando me disponía a regresar a casa; menudo fastidio. Mi sorpresa, con una simple llamada a MAPFRE, un trato correcto, amable y muy agradable, con una información clara y precisa. En 45 minutos, desde iniciar las gestiones, estaba solucionada mi avería.

Pinché la rueda de mi coche y llamé a la asistencia MAPFRE en carretera, enseguida llegó la grúa y, en un minuto, me cambiaron la rueda por la de repuesto. El trato fue muy amable y la rapidez en solucionarme el problema es de diez. Muchas gracias por la atención y la rapidez.

En Madrid, unos daños que nos encontramos en el vehículo estando aparcado. El comunicar el parte por la app de MAPFRE me parece un avance importante y más con los tiempos que vivimos. El taller excepcional, limpio, etc., con un agradable trato al cliente, buenísima organización, cumpliendo fechas y compromisos. El vehículo de sustitución limpio y con muy pocos km. En general más allá de la excelencia.

En autovía dirección Vigo, se me paró el coche, llamé a asistencia MAPFRE en carretera y, desde un primer momento, el trato y la amabilidad fue insuperable. A pocos minutos, ya contactó el taxi y la grúa conmigo, un diez a los profesionales.

Un domingo, paseando con mi esposa, en zona que no era habitual, al doblar la calle estrecha no vi un pivote de pequeña altura, estropeando el parachoques. Pasé parte y, a los pocos días, tuve el coche de sustitución y el coche bien reparado, como nuevo. Y en pleno mes de vacaciones. Muy contento.

Pérdida de agua en una tubería de entrada a la vivienda, situada por debajo de la solería del patio. Comuniqué el siniestro a MAPFRE a las 14:30h y, a las 18:30h, ya estaba arreglada. El fontanero que mandaron, una persona muy atenta, y me asesoró en todo lo que le pregunté referente al siniestro.

En Olmedo, se soltó un manguito del turbo, iba con mi mujer. Pude meterme en un camino de un pinar y llamé a la asistencia MAPFRE y, en 20 minutos, vino el taxista y, a continuación, la grúa nos llevó a la puerta de casa. El gruista se llevó el coche y lo dejó en la puerta del taller, siguiendo las indicaciones que le dije, fue todo perfecto. Chapó por los dos, un trabajo perfecto, gracias por todo.

Tuve el problema de que el coche no arrancaba, justo cuando me dirigía con la familia a pasear. Llamé a MAPFRE, al momento me atendieron muy amablemente y me dijeron que en 40 minutos estaría la grúa y los detalles de la misma. En la mitad del tiempo llegó la grúa, su conductor, muy amable y sin dudar, puso en marcha el vehículo ya que el problema era la batería descargada. Si bien no fue una incidencia complicada, da la impresión que funciona muy bien vuestro servicio. Gracias.

Tuve que pintar el coche por entero, además de que había sufrido un robo y tenían que sustituirme la luna y la bandeja del vehículo. Acudí a taller de referencia de MAPFRE (Blasnesan), en Alcobendas. Increíble el acabado del vehículo, se ocuparon de dar el parte, la peritación, el coche de sustitución… todo perfecto. Recomendable 100%. Experiencia muy positiva.

Sucedió en el parking de casa y fue saliendo el coche de al lado. Llamé al teléfono de información de MAPFRE y me pasaron con el departamento de siniestros y, a partir de allí, se fue resolviendo toda la documentación que hacia falta y todos los pasos de una forma sencilla. Se peritó el coche y se resolvió todo rápidamente. Contenta con la compañía.

Vivo en Albacete, al bajar para empezar con la jornada laboral, la furgoneta no arrancaba, el motor movía y tenía batería pero no encendía. Llamé a la asistencia de MAPFRE y me atendieron enseguida. La grúa dio 30 minutos de tiempo para llegar, pero a los 20 minutos ya estaba allí. Intentaron arrancarla y averiguar el fallo, no pudiendo ponerla en marcha, la cargaron y llevaron al taller que les indiqué. Todo perfecto, profesionalidad, atención estupenda y conocimientos del personal de grúa, un 10.

Salía del hospital de una analítica y tenía que dejar el coche en el taller para instalarle una bola de remolque. Cuando fui a arrancar, se fundió la batería, hice una llamada a MAPFRE y en un minuto me atendieron y, a los 15 minutos, ya estaba allí en el parking del hospital la grúa con su batería de arranque para poner en marcha mi coche. Apenas espere 20 minutos y puede llegar a tiempo a todo lo que tenía que hacer.

Odio esa sensación de mirar el espejo retrovisor y ver que está caído porque alguien le ha dado un golpe de mal gusto... pero al instante, llamé a mi agente de seguros de MAPFRE, Mar, y no dudó en abrir un parte. El resto fue fluido. En menos de diez días ya podía hacer uso del espejo que es tan importante para la conducción. Finalmente sensación positiva.

El vehículo se quedó sin aceite estando en mi domicilio y, por los ruidos que producía al ponerlo en marcha, el mecánico aconsejó llevarlo al taller auxiliado por una grúa. Por ello, solicité el auxilio a MAPFRE y el servicio fue inmediato y eficaz. Por ello, he quedado plenamente satisfecha por la atención en general.

Estaba con mis hijos y mi marido a punto de salir de casa cuando el coche se quedó sin batería. En una llamada de apenas 2 minutos y, en media hora, tenía el coche arrancado. Además de la información y la rapidez, destacar la rapidez y amabilidad del personal del servicio con MAPFRE. ¡Gracias!

El sábado me quedé varada en carretera y fue solo llamar a la asistencia MAPFRE, comprobar mis datos y, de inmediato, me llamó la grúa y el taxi para regresar a mi destino. Muy majos los chicos del servicio, quede muy a gusto.

Mi fortuna fue que llegué al Carrefour y entro en el aparcamiento con las luces encendidas y se me olvidó apagar, y cuando fui a arrancar no tenía batería. Me metí en la app de MAPFRE y pedí el servicio de grúa, el cual fue bastante amable. Sacó el arrancador y se puso en marcha. Tendré más cuidado la próxima vez. Muchas gracias.

Nada más sacar el coche del taller fui a pasar la ITV y, justo antes de empezar, el coche ya no me arrancó. Llamé por teléfono a MAPFRE para que viniera la grúa, pero yo no sabía que me entraba asistencia para recogerme y llevarme a casa o al taller. Como éramos dos personas, un coche vino a por mí, me trajo hasta la puerta de casa y mi acompañante se vino con la grúa para indicarle el taller.

El otro día me quedé sin batería en Sabiñánigo, llamé a la grúa de MAPFRE para que me pusieran las pinzas. Tardó 10 minutos en llegar y un trato excelente. El chaval me ofreció incluso una batería de su taller para llegar a la tienda donde iba a comprar la batería, aunque no fue necesario porque el alternador cargaba bien.

De un momento a otro me llama mi vecino del bajo, un local comercial, el típico problemático del bloque de pisos, indicando que caía mucha agua. En mi piso no se apreciaba nada, llamé a MAPFRE y el mismo día vino el fontanero. Unos pocos días después, el albañil puso las baldosas, y a mi vecino le repararon. No se ha vuelto a quejar, así que estoy totalmente satisfecha.

Se me rompió una tubería accidentalmente y, rápidamente, llamé a mi agente de MAPFRE. Ella me abrió parte enseguida y, en menos de dos horas, avería solucionada con profesionalidad y rapidez. Muchas gracias por la atención por parte de todas las personas que me ayudaron. Recomiendo mucho el seguro de hogar.

En el parking del Mercadona, llamé a MAPFRE y se pusieron en contacto con la grúa, me contestaron de inmediato. Debía ser algo eléctrico que ya están averiguando en el taller, porque se me puso en marcha. Como tenía el teléfono de la grúa, le dije que podía llevarlo rodando al taller yo mismo. La amabilidad y celeridad con que me trataron, me hace dedicarles palabras de agradecimiento.

Mi vehículo se averió súbitamente, llamé a MAPFRE y en 20 minutos tenía la grúa. El conductor me revisó el vehículo y, al ver que realmente no había mucho que hacer, lo cargó y se lo llevó. No puedo estar más satisfecho.

En Pamplona, de camino a una consulta hospitalaria, se rompe el embrague. Llamo a MAPFRE y a un familiar para que me lleve al hospital. Buena atención, la grúa llega en 10 minutos, lleva el vehículo a un taller conocido por un familiar y yo acudo dentro de la hora prevista al médico. Podía solicitar el taxi para el médico pero lo rechazo por el familiar que se ofreció a llevarme. Muy, muy, muy buena experiencia. Como sabía, y sé, MAPFRE es mucho MAPFRE.

Me dieron un golpe en el lateral de mí coche dañándome la aleta trasera, el parachoques trasero, la puerta del conductor y la llanta trasera. En siete días, el coche estaba reparado en mi garaje. Además, en el transcurso de la reparación, el taller me dejó un vehículo de sustitución. Todo de diez. Gracias.

Al salir del Mercadona y con la compra en el coche, llamé a MAPFRE y enseguida llegó la grúa y fue mi salvación, por su simpatía, su trato y su profesionalidad. Después, en el taller, la persona que me lo arregló también una maravilla. Al final tuve tanta suerte que pasé del disgusto de la avería a la alegría de la reparación en un momento.

Al llegar al trabajo me quedé sin coche y atendieron en seguida la llamada. Me enviaron una grúa que estuvo en quince minutos, muy rápido teniendo en cuenta que mi trabajo está en las afueras de la ciudad. Me ofrecieron el servicio de taxis y que volviese a llamar a la hora de la salida para enviármelo. Muy profesional.

Todo empezó cuando comencé a trabajar y necesitaba un vehículo para moverme, ya que desde donde vivo, en bici, tardaba mucho y no podía fiarme de los horarios de los autobuses. Mi esposa me comentó que su madre tenía el seguro en MAPFRE. En cuanto encontré un vehículo ciclomotor, necesitaba cuanto antes todos los papeles, el seguro... Me puse en contacto con MAPFRE y en cuestión de un día ya tenía todo lo necesario.Terminé cogiendo uno sencillo para cuando tenga el coche coger en MAPFRE otro para él.

Se me paró el coche en un pueblo cercano a mi casa pero en un momento que tenía prisa. Llamé al teléfono de asistencia MAPFRE y, tras recibir una explicación clara, a los 10 minutos estaba la grúa a mi lado y no solo eso, la persona que me atendió, además de amable, me dio una solución fácil que solucionó el problema al instante. No puedo estar más agradecida.

Próximo a Navidad, la encimera de la cocina comenzó a hincharse por el mal funcionamiento de un grifo que no nos habíamos percatado. Llamé a MAPFRE y, en media hora, el profesional se puso en contacto conmigo. Vino a ver el siniestro y me dijo que al día siguiente vendría a cambiar la encimera. Todo muy rápido y muy profesional.

Volviendo de Mazaleón, en la provincia de Teruel, donde habíamos estado probándonos unos trajes que nos estaban cosiendo a medida en la fábrica del pueblo, a mi padre, a mi hijo y a mi, para la boda de mi hermano. Al ir a arrancar, el coche no funcionó, así que llamamos a la asistencia MAPFRE y, en menos de media hora, vinieron a recogernos. Llevaron el coche al taller que les dijimos y a nosotros nos llevaron hasta casa.

Todo el proceso muy sencillo desde la app. Di el parte, al día siguiente por la mañana me llamó el reparador, vino y midió el espejo. Por la tarde, a las 18h ya estaba reparado. El reparador fue muy profesional. Aparte, nunca he tenido problemas con MAPFRE, siempre me han atendido bien y tengo dos pólizas de hogar con ellos.

Tengo un apartamento en la playa y, como no hemos podido ir por la culpa del covid, cuando fuimos el fregadero no funcionaba. Con solo una llamada a MAPFRE solucioné el problema. En el tiempo acordado llegó el fontanero, pero este no pudo y tuvo que llamar al camión de desatascos, que vino también en el tiempo establecido y, esa mañana, se solucionó el problema.

Salí del trabajo e hice una parada en Camas, Sevilla, para hacer una compra rápido, cuando quise reanudar la marcha para ir a casa, no podía arrancar al no tener batería. Llamé a MAPFRE para solucionar el problema. La atención fue rápida, se me explicó la cobertura de la que podía hacer uso. Me dijeron que tardaría unos 45 minutos en llegar la grúa, pero fueron 30 minutos. Tuve más suerte que mi hijo (un desastre) y me atendió un verdadero profesional, super amable, me cargó la batería en unos segundos y pude reanudar mi trayecto. Ya solo era cuestión de comprar y colocar una nueva batería.

Fuimos a pasar unos días a la casa del pueblo y nada más llegar nos dimos cuenta de que a través de las baldosas del comedor había una fuga de agua. Llamamos a MAPFRE y nos solucionaron el problema. En el pueblo tendría que haber ido llamando a fontaneros y albañiles (que no siempre están disponibles en un momento determinado). MAPFRE me envió un magnífico profesional que lo arregló todo eficaz y limpiamente. Encantada con la gestión.

Rotura del latiguillo de la cocina. Se inundó todo de agua en un momento, llegaba el agua por el pasillo, el comedor y la habitación que está entre el pasillo y la cocina. No tengo fotos de lo ocurrido porque en ese momento estaba bastante ocupada recogiendo toda el agua. Evidentemente cerré la general hasta que vino el fontanero y vio el parquet hinchado, por lo que dio parte él mismo a MAPFRE. Todo esto ocurrió estando sola y doy gracias de que fue cuando estaba en casa. Menos mal que había terminado mi jornada de trabajo por que si esto ocurre cuando no estoy en casa, el desastre hubiera sido peor.

Compré una casa de segunda mano y a las semanas de estar viviendo me di cuenta de que el sifón del lavabo de un baño perdía agua. Me puse en contacto con mi agente de seguros MAPFRE y en menos de dos horas habían registrado la incidencia, el reparador se había puesto en contacto conmigo y había reparado el desperfecto. Magnífico trato.

Una tarde, en el centro de Maliaño (Cantabria), me dio un pequeño vehículo, un Citroën C3, por detrás en mi KIA. Rellenamos el parte amistoso, muy importante para la pronta resolución de los siniestros. Al día siguiente, llevé el parte a la Oficina de MAPFRE en Santander y en una semana como máximo tenía arreglado el vehículo y estaba como nuevo.

El fin de semana antes de pasar la ITV anual fuimos a lavar el coche para dejarlo reluciente y, al sacarlo del parking para llevarlo al lavadero, resulta que tenía los dos espejos totalmente volteados, como si alguien al salir de su coche no hubiera tenido espacio suficiente de paso entre el suyo y el nuestro y le hubiera dado con su cuerpo a los espejos dejándolos salidos. ¡Menudo disgusto! Pues llamamos a MAPFRE y enseguida la chica que nos atendió nos tranquilizó, nos asesoró claramente sobre qué hacer, concertó una visita con el perito en el garaje de nuestra elección y en una semana teníamos los espejos arreglados.

No he tenido grandes aventuras, han sido casos menores pero muy beneficiosos para mí. Por ejemplo, íbamos a pasar unos días a León y paramos en una gasolinera a repostar y, cuando fui a poner el coche en marcha, no tenía contacto. Llamé a MAPFRE y en 20 minutos todo solucionado. Fue porque el fusible de la puesta en marcha estaba fundido, así que arrancamos el coche empujando y pudimos llegar al destino sin más problemas.

Por suerte fue una pequeñez, se me acabó la batería pero me pilló yendo hacia mi trabajo, teniendo que dejar a mí peque. Me agobié porque no sabía qué le podía pasar. La rapidez con la que me asistieron fue inmediata y con las prisas que tenía lo agradecí enormemente. En otras compañías, la llegada de la grúa se me hacía una eternidad. Además, el gruista fue muy amable conmigo, me resolvió enseguida todas las dudas del problema y del servicio. Muy de agradecer cuando entiendes poco.

Quise pintar mi coche entero y MAPFRE me lo ha hecho super fácil. Primero, el servicio que he recibido por parte del taller que me recomendaron. Parece que tengo un coche nuevo y, además, me dejaron un coche de sustitución que me lo trajeron y recogieron en mi domicilio. A la vez, aprovecharon para llevarse mi coche para pintarlo y esto fue comodísimo y super práctico, ya que no me quedé sin coche en ningún momento.

Ayer por la mañana, al ir a arrancar el coche, tuve la desagradable sorpresa de que me había quedado sin batería. Llamé a MAPFRE para que me mandaran una grúa y en unos 45 minutos, como mucho, estaba la grúa en casa. Arrancar el coche fue cuestión de segundos y a los pocos minutos había llevado el coche al taller. Tengo que decir que no hizo falta la grúa para esto. Serían las 12:30h. Por la tarde ya tenía es coche listo.

Salía de hacer unos papeles en el consulado, me dirigía para casa y el GPS me dijo que había perdido la señal. Fui a aparcar en línea para cerciorarme que funcionaba bien y me acerqué mucho al bordillo, se me rompió la rueda, así que llamé a mi oficina de MAPFRE y la chica que me atendió se encargó de todo. Me mandaron un mensaje con el tiempo de espera y la matrícula de la grúa, vinieron y me cambiaron la rueda. Pude continuar mi camino.

Tuve que llevar mi vehículo a reparar por un pequeño golpe. Hablé con siniestros y me recomendaron que acudiese al centro de Doctor Esquerdo, donde recogerían el coche, me darían uno de sustitución y me avisarían cuando estuviera terminada la reparación para poder recogerlo. También me lo había recomendado el agente de MAPFRE que lleva todos mis seguros. Todo funcionó a la perfección y en 9 días tuve mi coche reparado. En resumen, el servicio de MAPFRE es muy bueno y cómodo para el asegurado. ¡Enhorabuena!