Cosas que no entran a examen

Mónica, de Madrid

Soy profesora en una universidad en Madrid. El lunes 7 de julio varios alumnos se presentaban al examen extraordinario a las 8:30. Cuando fui a coger mi coche a las 7:10 para coger el tren, no arrancaba. Lo malo era que estaba estacionado en la rampa de nuestro garaje y no dejaba salir el coche de mi marido, que tenía que ir a trabajar.
Llamé a Mapfre, y quedaron en mandar una grúa. Me llegó un SMS con el tiempo aproximado de llegada, unos 45 minutos. Mientras mandaba mensajes a la universidad para organizar el examen y que mis alumnos no tuvieran problemas (aparte de los nervios), vi llegar la grúa. ¡No había tardado ni 10 minutos! Enseguida el conductor identificó el problema (batería), logró que el coche arrancara, y me fui. Después volví a tener el mismo problema, pero ya no había que llegar a ningún examen. Estoy muy agradecida a Mapfre por sus rápidas intervenciones.