He tenido que utilizar el servicio de asesoría jurídica para defender mi derecho a ser oído y tenido en cuenta ante Hacienda, a la que he tenido que abonar 5000€ por eso de que Hacienda somos todos… todos los que pagamos, que en mi caso, después de haber tenido que vender un inmueble por un poco más que su precio de mercado pero menos de lo deseado, encima me dicen años más tarde que soy bobo, que pague esos 5000 porque vendí barato, y claro, como estamos en un Estado de Derecho me recuerdan que puedo recurrir. Y por eso aquí estoy, por eso y por el pequeño detalle que a mi nadie me comunicó que se había realizado una nueva valoración y en base a qué criterios, y claro, sin posibilidad de poder alegar siquiera, eso si, pagar sí.
Gracias a la cordura, al saber hacer, a la ética razonable y a MAPFRE empiezo a ver la luz al final del túnel. Espero poder respirar tranquilo en breve, recuperar la inversión y tirar la llave del candado del baúl de este episodio a lo más profundo del último río.
