Hace 2 años

Daniel, de Barcelona

Una de las cosas que mejor recuerdo es la asistencia en carretera de MAPFRE en una situación compleja. Yo llevaba a dos personas discapacitadas y era verano. De repente, se partió el cable del embrague y paré en la cuneta, con un sol de justicia en verano. Tras señalizar la zona, llamé a MAPFRE y, antes de que remolcaran el vehículo al taller, tenía un taxi para mis dos acompañantes cuya atención no podía esperar. Sigo confiando en MAPFRE.