Tus malas artes

Asun, de Barcelona

Vinieron a casa hacerme una revisión del equipo de ósmosis. Era una cita programada. Aprovecharon la visita para venderme una descalcificadora. La persona que vino me engañó. Me dijeron que eran los fabricantes de la máquina de osmosis y luego comprobé que eran unos simples intermediarios. Yo, desde un principio, le dije que no quería comprar nada que solo había accedido a la revisión, aún así, no sé cómo me lió y al final firmé el contrato de compra. Al día siguiente me sentí fatal. Me di cuenta que compré una cosa que no quería y quise anular el contrato. Una compra financiada durante 5 años con una mensualidad de 65€. Como no lo tenía muy claro me puse en contacto con el servicio de asesor legal de MAPFRE y me atendió un abogada súper eficiente y amable que me escuchó (yo llamaba muy nerviosa y me costaba explicar con claridad). Ella me hacía preguntas y me explicó las diferentes opciones de desestimiento del contrato de compra. La atención personal fue excelente.